En Colombia la introducción del patinaje sobre ruedas se dio gracias al sacerdote Jesuita Mosser, quien inició su práctica en los colegios San Bernardo, La Salle, y posteriormente en el Parque Nacional. Este sacerdote jesuita enseñaba patinaje acrobático y hockey. 


Consuelo Velasco, una de sus alumnas, promocionó y divulgó la práctica del patinaje artístico; empezó en 1960 con las primeras escuelas de patinaje sobre ruedas, y en 1971 las de patinaje artístico, convirtiéndose en entrenadora, juez nacional y la primera presidente del comité técnico nacional de esta disciplina de la Federación Colombiana de Patinaje.

Entre 1960 y 1970, Consuelo Velasco se integró a los grupos de hockey que realizaban programaciones en diferentes escenarios de Bogotá y de Colombia, para hacer algunas demostraciones de patinaje artístico en los intermedios de los partidos. Contó con el apoyo de jugadores como Hugo Urdaneta, Alberto Escobar, Pablo Mora, Jorge Rubiano, Fernando Campuzano, Ricardo Gaitán y Maurice Gaitskell, entre otros, quienes, además, escuchaban con atención sus explicaciones porque algunos movimientos del artístico les servían para el hockey.


En 1970, Consuelo Velasco fue a Argentina en donde presenció el Primer Campeonato Suramericano de la especialidad y conoció algunos pormenores de la organización. Cuando regresó acudió a sus amigos más cercanos y les propuso la organización de un torneo nacional. En 1971 se realizó, bajo su dirección y coordinación, el Primer Campeonato Nacional de Patinaje Artístico, con la presencia de 53 deportistas, en representación de las ligas de Bogotá, Cundinamarca y Antioquia. La propia creadora representó al Distrito Especial y se proclamó campeona individual de mayores, mientras una de sus alumnas, Claudia Rosas, fue la revelación, en la división infantil. Este torneo, sin embargo, no se volvió a realizar en los 10 años siguientes, por falta de recursos.  

Apoyada por dirigentes como Víctor Sarmiento, Jefe de Control Deportivo de la Junta de Deportes de Cundinamarca, y Arnobia de Pedroza, secretaria de la Federación Colombiana de Hockey y Patinaje, Consuelo Velasco de Baquero halló aliados para la promoción del patinaje artístico en otras ciudades del país:, como Susana Jiménez y Luz Mery Tristán, en Cali; Aleida Acosta, en Medellín, y un bailarín que pertenecía al ballet de Jaime Ochoa, llamado Gabriel Gómez, en Bogotá, quien años más tarde descubriría a Edwin Guevara, quien a la postre se convertiría bicampeón mundial sénior de la modalidad libre.


A esos primeros instructores se unirían personajes como el profesor de danza Jairo Suárez, Emilio Castro, María Helena Castañeda, Adriana López, Gloria Castañeda y Consuelo Velandia, esta última, una de los más importantes jueces de la modalidad en Colombia. 

Este pequeño grupo, bajo el liderazgo de Consuelo Velasco de Baquero, fue la semilla que germinaría más tarde y que se extendería por todo el país.

La participación de Colombia por primera vez en un torneo internacional fue en el Campeonato Suramericano de Patinaje Artístico celebrado en 1973, en Montevideo, Uruguay, representado por Claudia Rosas, la primera campeona nacional infantil, dos años antes. Este evento le significó a Consuelo Velasco dos satisfacciones. Mientras su dirigida obtenía el tercer lugar, ella se estrenaba en el concierto internacional como Juez de Patinaje Artístico, que fue otra de las importantes actividades de la pionera de este deporte en Colombia, doña Consuelo Velasco de Baquero.


En la actualidad, el patinaje artístico de Colombia cuenta con una organización solida encabezada por la Federación Colombiana de Patinaje que desarrolla un calendario nacional para todas las categorías, lo que ha permitido su crecimiento en las diferentes regiones del país. Un ejemplo está en la participación de deportistas de 11 ligas de patinaje en los campeonatos de dicho calendario, al igual la participación masiva que se da en los eventos internacionales como los Campeonatos Panamericanos de Patinaje.    


Este crecimiento del patinaje artístico en Colombia ha permitido que el país sea sede de campeonatos mundiales, siendo el de Ibagué, Tolima el sexto organizado por la Federación Colombiana de Patinaje. Las cinco anteriores ediciones han sido en Bogotá 1980, siendo el primer certamen mundial en el continente americano, en 1986 repitió la organización Bogotá, en 1995 se realizó en Girón, Santander, en 1998 de nuevo la capital de la República recibió el evento y en el 2015 el turno fue para Cali, Valle del Cauca. 

Colombia cuenta, en júnior y sénior, con siete medallistas mundiales del patinaje artístico: Brayan Carreño (5 oros – 1 plata – 2 bronces), Edwin Guevara (2 oros), Viviana Osorio (1 plata – 3 bronces), Carolina Báez (1 bronce), Jeshua Folleco (1 bronce), Sabrina Mur (1 bronce) y Juliana Giraldo (1 bronce).